¿Para qué?

De que sirven,
los Te quiero,
las palabras dulces,
cuando ya nunca más
te las vuelven a entregar.

Para qué se guardan
las cartas,
las tarjetitas,
los regalos varios,
cuando su contenido
ya carece de sentido.

Qué fin tiene
recordar los buenos momentos,
los abrazos antiguos,
las miradas prolongadas,
cuando lo único que resta
es ausencia.

¿Para qué insisto en tu memoria
si la única realidad
es la distancia?

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